La cesión de datos se refiere al proceso de transferir datos personales de una entidad a otra, bajo ciertas condiciones y con el consentimiento explícito del titular de los datos. En el contexto de la protección de datos y la privacidad, la cesión debe cumplir con las leyes y regulaciones aplicables, como el GDPR en la Unión Europea, asegurando la protección de la información personal contra el acceso no autorizado o el uso indebido.
Es crucial asegurar que la transferencia cumpla con las leyes de protección de datos vigentes, obtener el consentimiento explícito de los individuos cuyos datos se están transfiriendo, y garantizar que la entidad receptora mantenga los mismos estándares de protección de datos.
El RGPD impone requisitos estrictos para la cesión de datos personales, incluido el consentimiento del titular de los datos, la necesidad de un contrato entre las partes que transfieren datos, y medidas adecuadas de protección de datos por parte del receptor.
La cesión de datos implica transferir datos personales a otra entidad, mientras que el tratamiento de datos se refiere a cualquier operación realizada con datos personales, como la recopilación, almacenamiento, uso o eliminación.