Un ciberataque es un intento deliberado de individuos o grupos para acceder a sistemas informáticos, redes o dispositivos con el fin de robar, alterar, eliminar, cifrar o exponer información; interrumpir operaciones o servicios; o causar daño. Los ciberataques pueden dirigirse a individuos, empresas, organizaciones o incluso gobiernos, y utilizan una variedad de técnicas y malware para lograr sus objetivos.
Incluyen ataques de phishing, malware, ransomware, ataques de denegación de servicio (DDoS), y explotación de vulnerabilidades.
Implementa medidas de seguridad robustas como firewalls, antivirus, cifrado de datos, autenticación multifactor, y mantén el software actualizado. Además, educa a los usuarios sobre prácticas seguras en línea.
Identifica y aísla los sistemas afectados, evalúa el alcance del daño, notifica a las autoridades y partes afectadas según sea necesario, y trabaja en la recuperación de los sistemas y datos comprometidos.