Quantum Key Distribution es una técnica avanzada de criptografía que utiliza las propiedades de la mecánica cuántica para distribuir claves criptográficas de manera segura entre dos partes, de tal forma que cualquier intento de interceptación alterará el estado cuántico de las partículas, revelando la presencia del espía.
La seguridad de QKD se basa en los principios de la mecánica cuántica, específicamente en la imposibilidad de medir el estado de una partícula sin perturbarla, lo que garantiza la detección de cualquier intento de espionaje.
Mientras que la teoría subyacente es segura, la implementación práctica de QKD puede tener vulnerabilidades, como fallos en el hardware que podrían ser explotados.
Actualmente, QKD se utiliza en aplicaciones militares y gubernamentales y está siendo investigado para su uso en comunicaciones civiles seguras.