Un centro de respaldo, también conocido como sitio de recuperación ante desastres, es una instalación donde una organización puede trasladar sus operaciones en caso de un desastre o interrupción mayor en su centro principal. Estos centros están equipados con la infraestructura necesaria para mantener las operaciones de negocio, incluyendo hardware de TI, conexiones de red y otros recursos esenciales.
Existen centros de respaldo en caliente, en frío y en tibio, diferenciándose por su nivel de preparación y el tiempo que se tarda en activarlos tras un desastre.
Proporciona un plan de continuidad de negocio al asegurar que las operaciones críticas puedan continuar sin interrupciones significativas en caso de un desastre, protegiendo así los activos de información y minimizando las pérdidas financieras.
La ubicación debe ser lo suficientemente lejana del centro principal para no verse afectada por el mismo desastre, pero lo suficientemente cercana para permitir una transición operativa viable. También se consideran factores como la estabilidad política y geológica, y la disponibilidad de servicios esenciales.